Todos los seres humanos, tanto creyentes como incrédulos, están sujetos a la muerte. La palabra "MUERTE" en las Escrituras, sin embargo, tiene mas de un significado. Es importante comprender la relación del creyente con los diversos significados de la muerte.
LA MUERTE COMO RESULTADO DEL PECADO.
Génesis 2-3 enseña que la muerte entro en el mundo por causa del pecado. Nuestros primeros padres fueron creados con la capacidad de vivir para siempre; cuando desobedecieron la orden de Dios cayeron bajo el castigo del pecado, que es la muerte.
1. Adán y Eva vinieron a estar sujetos a la muerte física. Dios había puesto el árbol de la vida en el huerto del Edén a fin de que los seres humanos al comer constantemente de el no murieran (Gen. 2:9). Pero después que Adán y Eva comieron del fruto del árbol del conocimiento del bien y el mal, Dios pronuncio estas palabras: "Polvo eres, y al polvo volverás" (Gen. 3:19). Aunque no murieron el día lo comieron, si estuvieron sujetos a la ley de la muerte como resultado de la maldición de Dios.
2. Adán y Eva también murieron una muerte moral. Dios le advirtió a Adán que el día que comiere de ese fruto prohibido, de seguro moriría (Gen. 2:17) esa fue una advertencia seria. Aun cuando Adán y su esposa no murieron físicamente ese día, si murieron moralmente, es decir, su naturaleza se hizo pecaminosa. Desde Adán y Eva, toda persona ha nacido con una naturaleza pecaminosa (Ro. 8:5-8) es decir, un deseo innato de hacer su propia voluntad egoísta sin preocuparse ni pensar en Dios ni en preocuparse por los demás (Gen. 3:6; Ro. 3:10-18; Efe. 2:3; Col. 2:13)
3. Adán y Eva también murieron una muerte espiritual cuando desobedecieron en el huerto, es decir, se arruino su anterior relación intima con Dios (Gen. 3:6). Ya ellos no anhelaban pasearse y conversar con Dios en el huerto; mas bien, se escondieron de su presencia (Gen. 3:8). En otro pasaje, las Escrituras enseñan que separados de Cristo, todos están sin Dios y ajenos de la vida que hay en Él (Efe. 4:17-18); están espiritualmente muertos.
4. Por ultimo, la muerte como resultado del pecado implica la muerte eterna. La vida eterna habría sido la consecuencia de la obediencia de Adán y Eva (Gen. 3:22); en cambio, ha llegado a operar el principio de la muerte eterna. La muerte eterna es condenación y separación eterna de Dios por causa de la desobediencia, es decir, eterna perdición excluidos de la presencia del Señor (2 Tes. 1:9)
JESÚS, EL CAMINO, LA VERDAD Y LA VIDA.
La única manera de escapar de la muerte en sus múltiples aspectos (muerte física, muerte moral, muerte espiritual, muerte eterna) es por medio de Jesucristo. Él, quito la muerte y saco a la luz la vida y la inmortalidad (2 Ti. 1:10). Por su muerte, Él ha reconciliado con el Padre a todo aquel que CREE (Jn. 1:12; 3:16; 6:47; 11:25-26; Hch. 16:31; Ro. 10:9-10) invirtiendo así la muerte espiritual y la enajenación que se había producido a causa del pecado mediante su resurrección.